Sebastian Michaelis VS Claude Faustus

Es uno de los protagonistas de la historia, el extravagante y refinado mayordomo de la Casa Phantomhive. Posee habilidades sobrehumanas, debido a que es un demonio, tal como se menciona en los primeros capítulos de la historia. Aunque finge como mayordomo, su deber es servir y seguir con lealtad a Ciel, debido al contrato que hizo con éste. Acompaña a Ciel en los casos que la Reina le encarga y está a dispuesto a hacer todo lo posible para obedecerlas. Sebastian lleva en su mano izquierda el símbolo del contrato -dicho símbolo es idéntico al que Ciel lleva en su ojo derecho-. Su lenguaje verbal es muy sofisticado, y lo usa para describir su servicio como mayordomo de la Casa Phantomhive.
Tiene una gran afición por los gatos. Según él, a pesar de haber vivido tanto tiempo, todavía no puede aprender a leer sus sentimientos. Los considera "esponjositos" y destaca que "no se quejan de cosas sin importancia".

Un mayordomo demonio que no muestra ninguna emoción. Él hace las cosas perfectamente y con facilidad, como se muestra en el primer episodio cuando baila claqué antes de cambiar la decoración. Él tiene una frase similar a Sebastián, en lugar de decir "Yes, My Lord" dice "Yes, Your Highness".
Aunque Alois quiere que sea animado, siempre lleva una máscara de indiferencia en el rostro y, a diferencia Sebastián nunca parece intentar detener a su amo cuando hace cosas injustas o inadecuadas. Esto puede ser visto cuando Sebastián detuvo una vez la bofetada de Ciel hacia Elizabeth, ya que fue una decisión precipitada; sin embargo, Claude no hace comentarios o acciones contra Alois por mutilar el ojo de Hannah. Al parecer, no importa lo psicótico que sea la acción que Alois realiza, Claude no interviene de ninguna manera para detenerlo. Ve a Alois como el alma que quiere cultivar y devorar.
Pese a que asesina a Alois en el episodio 8, en el capitulo final, gracias a Sebastian termina reconociendo a Alois como un alma digna de devorar ya que el chico fue capaz de crear una onda en la languida existencia de un demonio. Antes de morir dedica unas palabras a su profesión como mayordomo. Aun cuando no fue capaz de terminar la frase en la que diría a quien sirvió, se cree que era "Mayordomo de los Trancy", debido a que ya había reconocido a Alois.