[Elfen Lied][+15] La Voz del Sufrimiento

La sangre desfiló hacia todas las direcciones, manchando así el delicado cuerpo de la joven. El hombre cayó al suelo, sin fuerzas. Ella incrustó la mirada en la oscuridad, fijándolos de forma inexpresiva en los del herido, quien apartó la mirada hacia un lado, rogando sin palabras. Lucy sonrió y afiló la mirada hacia un lado, cortando en solo dos partes a la muchacha que se acercaba, quien observaba al hombre con mirada compasiva e impotente segundos antes de morir.
Él cerró los ojos con las pocas fuerzas que le quedaban, esperando con deseo a la muerte.
—¡Mátame! —ordenó a la vez que sus lágrimas se deslizaban por su rostro, mezclándose con su sangre.
—Deseas acabar con tu dolor —habló por primera vez la joven, con una voz cálida y apagada—, pero sin embargo no puedes, sigues ahí, sufriendo sin remedio, sin nadie que pueda ayudarte.
—¡Mátame, zorra! —volvió a exigir, gritando casi sin aliento.
—Pero no puedes hacer nada —musitó, ignorando sus palabras. Mientras, uno de sus brazos era arrancado sin remordimientos, siendo lanzado contra la pared del callejón, deslizándose lentamente y dejando la marca de sangre. El hombre, desesperado, dio un grito ahogado y se estremeció sobre el líquido y rojo charco.
Mientras este agonizaba de dolor, sin poder apartarse siquiera las lágrimas del rostro, ella comenzó a tararear con dulzura una hermosa melodía que recorría su mente. Él la miraba confuso y son puro terror de forma incesante.

A cada verso que esta tatareaba una pequeña parte del cuerpo del hombre era arrancada hacia diferentes direcciones. La joven seguía cantando, haciendo breves pausas solamente para coger aliento. Luego se acercó unos pasos a él, mientras una semilla de pánico crecía a gran velocidad en la mirada del temeroso hombre.
—Má... tame —rogaba como últimas palabras. Sus ojos miel los clavó en los carmesí de la chica, esperando que acabara con él de una maldita vez, anhelaba la muerte como nunca antes había deseado otra cosa.
—¿Duele? —preguntó ella de forma inocente, agachándose a su lado.
Él solamente respondió de forma afirmativa con la mirada, con los ojos nublados por las lágrimas, profundamente rojizos y cansados, pidiendo a gritos poder cerrarse y descansar eternamente.
—Cada gota de sangre —empezó a hablar, poniéndose en pie—.... es, solamente, una pequeña parte de mi sufrimiento —completó la frase. Luego él permaneció inmóvil, esperando con ansias su final—. La sangre es simplemente... —comenzó a decir mientras sus ojos se empañaban de lágrimas—... La Voz del Sufrimiento.

No tengo palabras....

Nahts Asrai escribió:No tengo palabras....

Entonces cumplí mi objetivo x)

Gracias chica es lo que necesitaba para poder dormir con tranquilidad. Espero más de lo mismo pero con otro color, otra voz. Por cierto...bienvenida

Kenshiro escribió:Gracias chica es lo que necesitaba para poder dormir con tranquilidad. Espero más de lo mismo pero con otro color, otra voz. Por cierto...bienvenida

x) Mi propio nombre explica lo que escribo xP Y sí, espero traer más escritos de otras variedades :3

¡Saludos!